Dos clubes de fans madridistas palestino y jordano han iniciado una campaña para que Ahmad Dawabshe, que perdió a sus padres y hermano en un ataque contra su vivienda de extremistas judíos y sufrió quemaduras en el 60 por ciento de su cuerpo, viaje a Madrid a conocer a su ídolo, Cristiano Ronaldo.

Las etiquetas #Dawabsheh_A_Madrid y #AlDawabshahToMadrid, que circulan por las redes sociales Facebook y Twitter en los últimos días han dado publicidad a la campaña, que trata de devolver la ilusión a este pequeño de 4 años, único superviviente del incendio provocado contra su vivienda el pasado julio.

La iniciativa fue ideada e impulsada desde el club de fans "Merengue Palestina" que, con la colaboración del también club de hinchas madridistas "Blanco Jordania", del país vecino, escribieron una carta al equipo solicitando su apoyo, explicó a Efe Jaled Suman, presidente del primero, que agrupa a unos dos mil palestinos.

"Hemos escrito al Real Madrid, pidiéndoles su apoyo para llevar a Ahmed a Madrid. Este niño ha sufrido un trauma terrible y, pese a todo, sigue amando al Real Madrid, tiene muchas fotos de los jugadores, el logotipo y la bandera", explica.

El pequeño, "necesita apoyo emocional y algo que le de una ilusión, algo bello en su vida que le pueda alegrar y conectar al mundo", dice Suman, que añade que otro de los objetivos de la campaña, es "difundir en el mundo la historia de los Dawabshe, la tragedia que sufrieron".

Según él, el club blanco ha mostrado su acuerdo y ha indicado los procedimientos a seguir, a través de la Federación Palestina de Fútbol, pero también están pendientes de que los médicos señalen cuál sería el mejor momento para el viaje.

Dawabshe ha estado meses ingresado en un hospital israelí, siendo tratado de las quemaduras que sufrió en el 60 por ciento de su cuerpo cuando extremistas judíos incendiaron su vivienda y la de sus vecinos mientras su familia dormía en la localidad palestina de Duma (sur de Cisjordania), el pasado 31 de julio.

Su hermano de 18 meses falleció al instante, mientras que su padre y su madre sucumbieron a las heridas y las infecciones causadas por las gravísimas quemaduras días más tarde.

El ataque causó conmoción en Israel y Palestina y fue duramente condenado por las autoridades israelíes, que lo calificaron de "terrorismo judío" y anunciaron recientemente haber detenido a dos sospechosos de cometer el crimen.

Para los palestinos, el incidente es una muestra de la gravedad de la violencia que los colonos extremistas ejercen contra su población y han anunciado que llevarán el caso ante la Corte Penal Internacional.

EFE